Hoy hemos visitado Voghtsbauernof, un ecomuseo al aire libre en pleno corazón de la Selva Negra. En él se puede experimentar como vivían y trabajaban la gente de la zona hace unos años. El museo tiene un recorrido de unos 2 km repartidos en 700 hectareas. En la web hay más información https://www.vogtsbauernhof.de/ las entradas ahí que sacarlas ahí, no se pueden sacar on line.
Nosotros hemos accedido a varias casa y aprendido como vivían entonces y se parece mucho a como vivían en España. Lo que le diferencia es la arquitectura exterior que se adapta a las inclemencias meteorológicas de cada zona.
Como nos hemos cansado un poco, hemos probado la típica tarta de Selva Negra… pero no nos ha gustado mucho. Y los peques se han comido un helado.
Cuando hemos salido de ecomuseo, nos hemos dirigimos hacia un camino sensorial que hay en el mismo pueblo https://www.parkmitallensinnen.de/ el cual nos ha sorprendido también muchísimo. Cuando hemos llegado, hemos sacado las entradas y nos han dado las llaves de una taquilla para dejar las zapatillas, ya que este camino sensorial se hace descalzo.
Durante el camino puedes sentir diferentes tipos de terreno, oler diferentes flores, tocar pelo real de diferentes animales de la zona, comer algún fruto de los árboles y arbustos del sendero, tener unas vistas impresionantes o sentarte a descansar en diferentes cabinas que se encuentran a lo largo del recorrido.
Una vez acabado el recorrido, hay una zona con grifos para limpiarse bien los pies y volverte a poner las zapatillas. Desde luego que ha sido una experiencia 100% recomendable.
Cuando nos despedimos hemos hablado con uno de los dueños que estaba aprendiendo español y nos ha comentado que todas las mañanas revisan el circuito para que este en perfecto estado.
Con los sentidos a flor de piel tocaba continuar el viaje dirección a Triberg uno de los sitios más top de Selva Negra.
Al llegar a triberg, como vamos justos de tiempo, lo primero que hacemos es ir a visitar el reloj de cuco que esta a las afueras. Estaba todo tan calculado que llegamos a menos 2, pagamos y fuimos a ver salir el cucu… justos justos, luego ya visitamos el reloj por adentro y nos explicaron como funcionaba la maquinaria.
Visto el reloj nos dirigimos a ver su cascada y hacer una mini ruta por el entorno. Entrada pack familiar 20€. Al que va de paso, cañazo… pero buenos ya descartemos la cascada de Todtnau, así que esta había que verla. Hay varios circuitos de diferentes dificultades, nosotros fuimos alternando y la verdad que el entrono es muy chulo, la cascada también, pero teniendo el Pirineo Aragonés tan cerca de casa y conociendolo tan bien… nos quedamos un poco chafados, creemos que tenemos cascadas mucho más bonitas en el pirineo Aragonés, pero bueno, ésta tenía también su encanto y creo que esto a veces pasa cuando te creas unas expectativas… que a veces no se cumplen.
Acabada la ruta, pasamos por el súper a comprar un par de cosas y en aproximadamente 1 hora llegamos a dormir cerca del siguiente destino.
Bichos Mochileros 