El fin de semana pasado aprovechamos la apertura de provincias en nuestra comunidad autónoma para visitar el Monasterio de piedra… un lugar lleno de cascadas difícil de imaginar en mitad de una sierra con vegetación esteparea.
El recinto turístico alberga una zona llena de caminos señalizados para visitar las diferentes cascadas ubicadas a lo largo del recorrido y disfrutar a su vez de un paisaje karstico esculpido por el río piedra. También cuenta con un monasterio cisterciense, el cual decidimos no vistar y un hotel. El precio de la visita general es de 16€ (11€ la reducida, para niños de 4 a 11 años y jubilados). Muy recomendable llevar calzado y ropa cómoda por la gran cantidad de escaleras que hay sobre todo en la segunda parte de la visita. En está, además hay un montón de grutas por donde discurre el recorrido donde todavía drena el agua y corres el riesgo de mojarte un pelín.
Nada más entrar tienes la opción de hacerte una foto familiar para recoger a la salida y ahora por tema covid, tienes la oportunidad de coger un búho y fotografiar el momento… antes del covid solía haber exhibición de aves rapaces que han tenido que posponer por ahora. En las zonas en donde es imposible pasar sin agarrarte a una barandilla, al finalizar dicho tramo, encuentras dispensadores de gel hidroalcohico y la zona de juegos de niños permanece (a día de hoy) cerrada, pero no pasa nada, al finalizar la visita puedes comprar un helado en el bar, que al igual que el restaurante, permaneces abiertos.
El balance general ha sido muy positivo. Hace años que habíamos estado y queríamos repetir… pero el precio de la entrada es un poco excesivo. Aun así pasamos un día estupendo.








